Después de un día entero sin entrar a Badoo volvemos a acceder.
Las estadísticas, como no podían ser de otra manera siguen todas a 99+. Y decimos «como no podían ser de otra manera» no porque seamos una mujer de 10, si no por lo que encontramos dentro de Badoo.
Después de un día de inactividad, la popularidad sigue siendo «Muy alta».
Lo que se nos han acumulado han sido 242 mensajes en un solo día:
Vamos, como en la ocasión anterior, a ver algunos de los mensajes de bienvenida (ignorando los obscenos) de los chicos ante, recordad, una mujer cuarentona de lo más normalito:
Hola wapaa. Me gustaria conocerte no soy el de las fotos si me das la oportunidad…
Empezamos con otro que no es el de las fotos, ninguna novedad.
Estaras muy solicitada xD, cuando puedas hablame eh
Hola *** como estas? Me gustaria conocerte sin malos rollos pasar unos buenos ratos de risas… ya sabes
De momento este se lleva la palma de los mensajes de bienvenida para romper el hielo:
Hola..tu gusta negrito..?? Puedo darte 28cm..rubia con negrito hace buena película…beso..
Le responderemos a ver por dónde nos sale. Nos acabará pagando el hotel.
Madremiaaaa mamii
Al del próximo mensajes también le responderemos a ver que tal la cosa:
Buenas preciosa estas buenisima a primera vista
Hola preciosa te dejo mi Núm por si quieres que nos conozcamos eres preciosa 6********
Ya obviamos, por pesados, todos los que nos envían fotos sin ropa.
Vamos a empezar a interactuar con los chicos (aunque a dos de los anteriores ya les contestamos).
Abriendo uno, y antes de poder decir nada, nos encontramos con este caso aparte:
Nos envía fotos de flores y nos dice que no busca relaciones sexuales. Quiere ser el dueño de nuestro corazón ¿?¿?¿?¿?
¿Será real? Vamos a contestarle.
Hay que decir que un par de tíos siguen confundiendo nuestro apellido con nuestra ubicación. Nos apellidamos Torrent, pero no quiere decir que seamos de Torrent.
Vamos con un chico de 25 años, después de escribirnos su vida en dos mensajes llenos de caritas, y sin mediar mucha palabra, nos dice que puede venir a nuestra casa, en metro.
Le decimos que vivimos sola, y nos dice que puede venir, pero que no sabe si hoy podría, porque el último metro pasa a las 22:15.
Adorable.
La decimos que hoy no que ya hemos quedado, a los que nos responde que cuando le conozcamos no querremos a otro, y, como no, foto sin ropa (dos).
Nos termina diciendo que haríamos buena pareja ?¿?¿?¿? y que quiere vernos de cerca.
Volvemos al que nos dijo que no buscaba relaciones sexuales. Nos pregunta qué buscamos y le decimos que alguien joven, ya somos muy mayores y queremos olvidarlo.
Nos acaba diciendo que nos puede hacer olvidad nuestra edad y nos acaba enviando una foto, que aunque hemos difuminado, podéis haceros una idea.
Sí, este era el que no buscaba relaciones sexuales y quería ser el dueño de nuestro corazón.
Nos vuelve a contestar el tío que decía que «rubia con negrito hace buena película…beso..».
Le habíamos preguntado que si era real, y nos respondió que sí, además de darnos más datos son su «aspecto» y que si queremos ver fotos.
El chico se empieza a calentar, bueno, más bien ya venía así. Nos pregunta que si nos iríamos un hotel y que si hemos probado chocolate (de aquí deriva el título del post).
Ya tenemos una edad…
Nos viene muy subido.
Le decimos que en nuestra casa nuestras normas, por lo que nos acaba pagando el hotel.
Lo siguiente lo obviamos. Fotos y número de teléfono.
Aquí termina este tercer día en Badoo. Con un chico que vendría a nuestra casa pero antes de las 22:15 ya que es cuando pasa el último metro, un «romántico» al que no le interesan las relaciones sexuales, y un tipo que nos paga el hotel, entre lo más destacado.
Badoo, una caja de sorpresas que nos encanta.
